De detrás de la máscara a ser visto – Lo que el enmascaramiento nos dice y lo que exige

Para muchas personas neurodivergentes y sus familias, enmascarar es parte de la vida diaria. Quizás hayas encontrado el término en historias de pares en Instagram, en conversaciones o en artículos de investigación, donde las personas describen cómo es tratar de encajar en las expectativas del entorno.

En esta publicación, hacemos una pausa para explorar qué es enmascarar, por qué las personas dependen de ello y qué podría significar en tu vida cotidiana.

¿Qué es enmascarar?

Enmascarar se refiere a las estrategias que las personas usan para ajustar su comportamiento o apariencia para cumplir con las expectativas sociales. Por fuera, todo puede parecer "bien", pero bajo la superficie hay un esfuerzo constante por adaptarse.

Enmascarar no es fingir: es una estrategia de supervivencia en situaciones donde las normas sociales se sienten obligatorias. A menudo permanece invisible para los demás, a veces incluso es elogiado, aunque puede tener un alto costo personal.

¿Por qué las personas enmascaran?

Todos tenemos una profunda necesidad de pertenecer. Enmascarar puede proporcionar seguridad a corto plazo y ayudar a navegar espacios sociales, pero no se trata solo de una elección individual. Las presiones ambientales, las normas sociales y la falta de aceptación a menudo hacen que enmascarar parezca la única opción.

Cuando las comunidades no reconocen la diferencia o dejan poco espacio para la flexibilidad, las personas pueden sentir que deben ocultar partes de sí mismas para estar seguras.

Los beneficios y costos de enmascarar

A corto plazo, enmascarar puede facilitar las interacciones. Pero con el tiempo, los costos pueden ser altos: diagnóstico tardío, necesidades de apoyo no satisfechas, agotamiento y la dolorosa sensación de que tu yo auténtico no es suficiente.

Por eso la responsabilidad no recae solo en el individuo. Las escuelas, los lugares de trabajo, las familias y las comunidades juegan un papel crucial: cuando el entorno se vuelve más aceptante y flexible, la necesidad de enmascarar disminuye.

Espacios seguros para ser tú mismo

Las máscaras se quitan donde hay seguridad. La aceptación, el estímulo, el reconocimiento de fortalezas y las formas flexibles de hacer las cosas facilitan la respiración.

Todos se benefician cuando una comunidad permite que se muestre la diferencia. No solo el individuo gana libertad, sino que todo el entorno se fortalece a través de la diversidad.

La máscara cuenta una historia de supervivencia

Enmascarar es una estrategia de supervivencia en un mundo que no siempre entiende la diferencia. Al mismo tiempo, es una señal profundamente humana de nuestra necesidad de pertenecer y sentirnos aceptados.

Cuando las comunidades y los entornos se vuelven más comprensivos y abiertos, la necesidad de enmascarar disminuye, y es entonces cuando se puede ver el verdadero yo.